Hace unas semanas, Jordi de Paco explicaba en una de sus charlas celebradas durante la Málaga Jam cómo había sido el recorrido de Deconstructeam. En su ponencia compartió que durante los primeros años trataron de optimizar sus recursos focalizándose en diseñar los juegos que «parecían funcionar mejor» con el público del momento. Este enfoque era fuente de frustración y miserias, ya que ni el proceso era especialmente enriquecedor, ni los resultados posteriores eran para tirar cohetes.
