Esta generación ha muerto. ¡Viva esta generación!

Generación Carca

Escrito por en Artículos - 19 noviembre, 2013

No juego mucho. No tengo demasiado tiempo ni interés. Podría haber participado en el estupendo artículo en el que hemos repasado los mejores juegos de esta generación, pero no hubiese aportada nada. No he jugado a nada más interesante de lo que ahí aparece y ni siquiera he probado todo. Pero los años de esta generación me han dejado experiencias y una impronta en mi vida que nunca voy a olvidar. Esto es lo que me queda, directa o indirectamente relacionado con los videojuegos, de la current gen.

Me compré una Dreamcast

Una de las primeras cosas que me pasó en esta generación de consolas es que se me rompió la X box 360. Los anillos de la muerte y esas cosas. Un día, un gordo con orejas de gato me ofreció una Dreamcast vieja con cuatro mandos nuevos. Lo vi claro. Mi amigo Jose tuvo una en su momento y yo flipaba con el Power Stone y el Jet Set Radio, así que pensé que era el momento de desquitarme y darle duro a todo el catálogo. Lo primero que aprendí es que todos los juegos de Dreamcast son divertidos. Esta consola puede tener juegos mejores o peores, pero no recuerdo ninguno con el que no me lo pasara bien. Lo segundo que aprendí es que si era divertido entonces, puede ser divertido ahora. Incluso Shenmue, que ha envejecido fatal pero que todavía da clases magistrales sobre videojuego moderno. Esto me hizo reflexionar bastante sobre diseño de niveles y esencia de un videojuego, algo que esta generación ha sepultado bajo kilos de madurez impostada y cinematografía chusca. Y aquí estoy, Seguero gracias al gordo con orejas de gato del Salón del Manga.

latin

Hice un roadtrip de forajido por el desierto

Siendo honestos, me fui de vacaciones a un chamizo en Las Negras y estuve de rutas por el desierto de Tabernas, en Almería. Pero la esencia de mi motivación estaba ahí. Coincidiendo con un punto de inflexión en mi vida (me despidieron) organicé una escapada con unos amigos para reflexionar al estilo «i don´t give a fuck». Siempre he sido un gran apasionado de los Western, así que echarle el guante a Red Dead Redemption fue el empujón que me faltaba para hacer realidad esta fantasía preadolescente. Después de jugarlo, me apetecía sentir el aire ardiente del desierto. Masticar tabaco y tocar la tierra seca. Acostar un sol polvoriento sin más compañía que mis cuatreros y mi coche de alquiler. Al final acabé recorriendo las decadentes rutas del western por los pueblos de la zona y disfrutando del «espectáculo»  que nos ofrecían unos stunts venidos a menos en los poblados del oeste cinematográfico. También acabé ciego de Jagger y desnudo con mis compadres en una cala hippie, pero eso es otra fantasía aparte.

carcajail

Aprendí que la industria no va de videojuegos, va de personas

Antes os dije que me despidieron, ahora os voy a contar por encima de qué iba mi trabajo. Tenía que ver con el mercado publicitario, así que durante estos años he tenido mucho contacto con las distribuidoras y editoras. Esencialmente, gente de prensa y de marketing. Algunos grandes profesionales y otros no tanto. Como en todos sitios. De lo que estoy seguro es de la motivación que hay detrás: cumplir con sus objetivos para cumplir con su empresa, que es quien paga. Y luego, la pasión por los videojuegos, pero menos. La pasión quizás os mueva a vosotros, pero no es lo que da de comer a la industria. Un titular supuestamente tendencioso o un desacierto en la promoción de un juego, no esconde maletines, una falta de respeto al jugador o una política para acabar con los hardcore gamers. No es nada tan importante. Simplemente, las personas hacen su trabajo y a veces la cagan. Nada más. No suelen ver el producto como algo trascendental en sus vidas, y lo es más que en las vuestras, puesto que comen de ello. Es algo mucho más profesional. Una vez vi a un magnífico responsable de Marketing de Electronic Arts pasar a LG tan ricamente. Lo importante no era su pasión por los videojuegos, es su pasión por el Marketing y por su trabajo. La industria sólo quiere que el juego venda mucho y utilizan todas sus herramientas para conseguirlo. Y claro que me gusta que las cosas se hagan bien y con conocimiento de causa, yo soy el primero que chirría ante una noticia o una estrategia mal planteada. Pero no os lo toméis como algo personal. Y relajaos, que son sólo videojuegos.

 La pasión quizás os mueva a vosotros, pero no es lo que da de comer a la industria.

Nací.

John Carca ve la luz un 2 de Septiembre de 2008, en pleno apogeo de la current gen. Al principio, escribía análisis soeces de juegos a los que no había jugado. Era un experimento. Quería ver si metiendo frases de análisis de verdad entre párrafos inventados, colaba. Y coló. Lo que nació como una crítica a los periodistas cutres de copia-pega, fue juntando seguidores que consolidaron a John Carca como un analista cachondo que soltaba verdades como puños. Y era verdad. Sólo que esas verdades las sacaba de las notas de prensa, algo de deducción lógica y mucho morro. Buenos tiempos. El caso es que le cogí gustillo al mundillo y poco a poco mis textos tuvieron más coherencia y menos cartón piedra. O al menos eso os creéis.

Esta es mi primera maquetación con el nuevo diseño y no tengo claro para qué sirve cada cosa

Jugué a todos los juegos que recomienda Andresito

Lo sé, tengo una especie de adicción fanboyista hacia Andresito. Otros la tienen hacia Lady Gaga. Después de tanto tiempo, he llegado a la conclusión que recomiende lo que recomiende nuestro guapo co-fundador, seguro que me entusiasma. Aunque parezca una mierda. Me pasó con Alpha Protocol, me pasó con Just Cause 2 y me pasará con todo lo que tenga su aprobación de calidad. Gracias a sus reseñas, he disfrutado y me he aficionado a los videojuegos como nunca antes. Es algo que me jode, porque todos los matices y sensaciones que me despiertan esos juegos, ya los ha descrito él en un texto. Por eso escribo poco (ja!). Será que tenemos el mismo gusto, al menos en lo que respecta a videojuegos y ropa interior.

andres BIG

Crecí.

Me incorporé como fichaje galáctico de El Pixel Ilustre en su edición 2.0 (no se conserva ni mi primera entrada) Fue la época del cambio y el subidón de visitas. Started from the bottom, now we´re here. Nos hemos reído de las presentaciones, de los medios, de los eventos chuscos de Marketing y nos han dado un premio por eso. De una forma más o menos (más bien menos) activa, siento que he contribuído a crear esta santa casa. La casa ilustre. Aquí he aprendido muchísimo, me he divertido muchísimo y he conocido a gente estupenda. Parece toda una vida, pero ha sido sólo una generación de consolas. Por eso le voy a guardar especial cariño a esta Play, esta X box y esta Wii, porque han sido las que me han acercado a unos cabroncetes como vosotros. Tal vez mi paso por esta generación de consolas haya sido poco videojueguil, pero al menos intenté que fuera lo más Ilustre posible.

DSC01564

Humble Mobile Bundle 3 viene con Ridiculous Fishing

Un comando talifan sabotea las PS4