Los japoneses llevan décadas haciendo videojuegos sobre y para pervertidos sexuales, pero ha sido Cobra Club el que lo ha unido con esa tendencia al alza (nunca mejor dicho) que son los selfies. No soy demasiado aficionado a las indiegencias y no pienso jugar a Cobra Club, pero creo que una marranada de este calibre es absolutamente merecedora de una entrada para El Píxel Ilustre. Y advierto que las fotos de después del salto son absolutamente NSFW.
![](https://i0.wp.com/www.elpixelilustre.com/wp-content/uploads/2015/06/Cobraclubdest.jpg?resize=690%2C200&ssl=1)