Analisis comparativo: Heavy Rain VS Alpha Protocol

Escrito por en Análisis - 25 enero, 2011

Heavy Rain vs Alpha Protocol

¿Nos hemos vuelto locos? ¿Estamos mezclando churras con merinas? ¿Cómo se nos ocurre comparar uno de los GOTY’s de 2010 con una bazofia con menos de 70 en Metacritic? Pues, tras haber jugado a los dos, me toca afirmar que las semejanzas son más que evidentes. A continuación, vemos en qué se parecen y en qué se diferencian Heavy Rain y Alpha Protocol.

¿EN QUÉ SE PARECEN?

Olvidémonos de Final Fantasy, de Dragon Quest, de World of Warcraft, de Diablo, de Dragon Age, de Oblivion, de los Zelda y de todos aquellos que se hacen llamar RPG o JRPG. Sin lugar a dudas, la experiencia más rolera con un videojuego la he tenido con estos dos juegos, que curiosamente no están ambientados en un mundo de fantasía, requisito que parece imprescindible en el género. Ya expuse mis razones sobre Heavy Rain, y casi podría afirmar lo mismo sobre Alpha Protocol. Y entendemos “experiencia rolera” sobre lo que es realmente importante en los juegos de Rol: el desarrollo de una historia y ver como nuestras acciones condicionan el devenir de los acontecimientos.

Ethan Lvl.1. Lo sé porque lleva una armadura chupa de cuero

En la primera partida de ambos juegos nos parece llevar las riendas de la narración, que cualquier cosa que hagamos tendrá consecuencias más adelante, sean buenas o sean malas. Además, en los dos deberemos tirar p’alante apechugando con nuestras decisiones, sean aciertos o sean errores. Y eso, señores, es mucho más rolero que cualquier sistema de niveles, inventario infinito de armas y equipo y/o infinitos combates por turnos contra criaturas infernales, o sea, los “elementos RPG” que enarbolan muchos títulos por bandera y que tanto nos gustan (especialmente a Kirkis)

¿Se acepta «Terrorista Islámico» como «Criatura infernal» en el Escatergoris? Seguro que en USA sí

¿EN QUÉ SE DIFERENCIAN?

Básicamente, la mecánica jugable es totalmente distinta en los dos juegos. Alpha Protocol tiene la jugabilidad “tradicional” de un shooter en tercera persona: moverse por un escenario, cubrirse, disparar, esconderse de los enemigos, etc. y si morimos, volveremos al correspondiente punto de control, pero aún así dista mucho de ser un Splinter Cell con pantallas de estadísticas” como lo he visto descrito algunas veces. Vale que en Alpha Protocol también subimos de nivel, asignando puntos a nuestras habilidades para mejorarlas, pero también ganamos habilidades según las acciones que realicemos o como interactuemos con los personajes secundarios. Eso sin tener en cuenta que las posibilidades de personalización de Michael Thorton son muchísimas: podemos ir desde un experto en sigilo y artes marciales hasta un One Men Army cargado de artillería pesada.

Y también podemos transformarlo en un garrulo, que siempre se agradece

Heavy Rain es otra cosa. Mucho más cinematográfico (y mucho mejor en tema de gráficos), el sistema de control está bastante alejado de lo considerado normal, con un sistema mediante QTE’s que se ha ganado bastantes detractores y que, pese que yo era el primero que no daba un duro por Heavy Rain, tengo que reconocer que le sienta como un guante al sistema de juego. Tampoco encontraremos acción tal como la entendemos en el resto de los videojuegos; Heavy Rain es un juego lento, que no aburrido, y no tendremos que esperar tras un parapeto a que el enemigo de turno asome la cabecita para apuntar otro headshot al marcador… Ni falta que le hace…

Buscar pistas, lo más dinámico de Heavy Rain

Y, mientras Mike Thorton es un personaje la mar de plano, totalmente vacío, al que nosotros le añadimos color y sabor a medida que avanzamos en la misión encargada por Alpha Protocol, y con el que acabamos identificándonos mucho más que con el típico protagonista mudito que solemos ver en sagas como Dragon Quest o The Legend of Zelda, en Heavy Rain controlamos a cuatro personajes, cada uno con sus motivos, sus intenciones, sus pasados y sus manías. Dos maneras distintas pero igual de efectivas a la hora de meternos en la piel de un jugador.

Lo único que consigues con un prota mudito es parecer gilipollas

ENTONCES… ¿A QUÉ COJONES VIENE ESTE ARTÍCULO?

Desde hace años, el RPG ha estado entre mis géneros favoritos. Lo he visto evolucionar, desde los primeros a los que jugué con los 16 bits, la explosión de los JRPG de PSOne y al auge (gracias a Baldur’s Gate y similares) y caída (gracias a Diablo y WoW) del RPG Occidental. Ya me había resignado a que los RPG para consola tuvieran lo mismo de rol que las páginas amarillas, que la única ventaja que ofrecían frente al resto de juegos era un buen puñado de horas más de duración y que estaban peligrosamente estancados.

Lo más parecido a un Monstruo que veremos en Heavy Rain

Gracias a Heavy Rain y Alpha Protocol veo que aún hay esperanza, que es posible, gracias a los avances técnicos, unos RPG con la R en mayúsculas y no simplemente juegos de acción con inventario y niveles. Esperemos ver pronto algún juego que aplica la mecánica de estos dos juegos en un entorno de fantasía épica que, pese a todo, me sigue atrayendo más que los crímenes sin resolver y las tramas de espionaje.

1...2...3... Kick It!

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