Ojo a esto, hermanos. A primera vista KeeperRL parece un roguelike de tiles genéricas con poco más que ofrecer que un montón de mazmorras llenas de trampas, enemigos y mucha muerte. Lo típico. Sin embargo KeeperRL guarda un as debajo de la manga. En el menú principal, a la hora de elegir nuestra profesión, podemos escoger entre aventurero y guardián. La primera opción nos conducirá directos al mencionado esquema tradicional del roguelike, sin mucha más historia que esa; pero la segunda transforma el juego por completo, ofreciendo una suerte de Dungeon Keeper pixelado, con perma-muerte, aleatoriedad, y mucha mala hostia.
