Ya no somos niños...

Escrito por en Artículos - 14 marzo, 2012

Buenos días. Me llamo Galious, tengo 32 años y me gustan los videojuegos. A pesar de tener un trabajo normal, estar casado y tener una vida social regular, decir eso me convierte automáticamente en un inmaduro que sigue jugando a marcianitos con pelos en los huevos. ¿Por qué? Porque los videojuegos siguen siendo para niños.

Es curioso ver como dos de mis principales aficiones (los videojuegos y el heavy metal) se consideran algo más bien propio de la adolescencia. Conozco a demasiada gente que pese a que en sus años mozos se pasaban el Golden Axe con 25 pesetas y llegaban a dormir con su chupa vaquera con un parche de Iron Maiden en la espalda puesta, ahora reniegan de él como un pecado de juventud. Argumentan que esas cosas son “para críos” y ellos ya no son críos y por eso les gustan cosas supuestamente más adultas… Como Marlango

 

Seguro que su éxito no tiene nada que ver con que la cantante sea una conocida actriz… Si, claaaaro…

Pero en demasiadas ocasiones no puedo evitar sentirme como un crío… No hace mucho, compré el Etrian Odissey para NDS en una tienda de informática, un juego que los que lo han probado saben que es bastante distinto al resto del catálogo de la portátil y la dependienta me soltó “¡Vaya! ¡Una niñita se va a poner muy contenta con esto!” ¡Un Gallifante para Nintendo por conseguir que a ojos de los no iniciados la DS sea una consola para niñas y ancianos! Y la cosa no acaba ahí: las revistas y programas de televisión dedicadas a los videojuegos me parece que están en el mismo punto que hace 20 años, cuando los videojuegos sí que eran algo para niños. Y el problema es que la mayoría de las webs han imitado a esos medios en lugar de intentar adaptarse a esos jugadores que han madurado junto a la tecnología.

 

Ya han pasado 21 años…

Éramos niños los que compramos esa primera Hobby Consolas, con ese icono de lo molón que era Bart Simpson (ahora a todo el mundo le mola más Homer, pero en los 90 los Simpson eran Bart y su videoclip “Do the Bartman”), pero los que siguen aficionados a los videojuegos ya no lo son. Son adultos que merecen que se los trate como tal y no como frikis, esa palabra que hace unos cuantos años nadie usaba y que ahora significa algo cercano a “aficionado a…”.

Aunque me divierte la serie, ha conseguido dar la falsa impresión de que lo friki mola…

En otros ámbitos, como el cine y la literatura, hay una diferenciación clarísima entre lo que es infantil, juvenil y para adultos. En los videojuegos no lo encontraremos más allá que la clasificación PEGI, esos numeritos que la mayoría de gente se los pasa por el forroloscojones y gracias a ello tenemos el multijugador online de los Call of Duty llenos de prepúberes con demasiado tiempo libre. Pero aparte de eso, no encontramos ejemplos donde se mime al jugador adulto y se lo trate como tal.

 

Necesito algo más que una chica mona a la que se le nota a la legua que no sabe sobre qué está hablando para interesarme en un programa sobre videojuegos

Personalmente, estoy cansado que me traten de imbécil cada vez que pillo un programa de televisión que habla de videojuego o hojeo una revista del sector. Yo no necesito que alguien me diga que los gráficos son buenos o que le ponga una puntuación de más de 95 al apartado de gráficos para darme cuenta de la calidad gráfica de un videojuego, por poner un ejemplo ¿No se pueden abordar los videojuegos de otra forma que no sea diseccionándolos por apartados? ¿No hay otra forma de enfocar los contenidos? Seguro que sí ¿Rentable? Eso es otra cosa.

Por lo menos, la adicción ya no es un parámetro como en la MicroHobby. Lo actual es «El Resto»

Y con todo esto no quiero decir que haya que echar a los niños de los videojuegos, más bien al contrario: creo que los niños merecen algo más que esa basura en forma de packs Disney Channel (serie de dibujos, película, juguetes, mochila, álbum de cromos y videojuego, todo listo para el consumo sin criterio) que se les ofrece ahora y, salvo excepciones como las que ofrece Nintendo, ocupan el océano de mediocridad que es la clasificación PEGI 7. Solo pido que no se nos meta en el mismo saco a los que llevamos 20 años tras los mandos.

 

Me parece mal, pero que la alternativa sea el videojuego de Gormiti o Bakugan me parece peor

¿Soy el único al que le pasa eso? ¿Alguno más se ha sentido terriblemente mayor al entrar en un GAME sin un nene de la mano que diga constantemente “¡Papá, cómprame éste!”? ¿Conocéis a alguien que reniegue de su pasado járcor? ¿O vosotros jugáis de escondidas cuando no hay nadie en casa? A lo mejor será que nos estamos volviendo viejos…

El Dioni quiere tu pasta para hacer un videojuego

Neo Scavenger