Unas palabras sobre Game Center

Escrito por en Artículos - 2 octubre, 2010

Game Center salió hace algo menos de tres semanas y ya ha conseguido exactamente lo que se proponía: convertir al iPod Touch / iPhone en la mejor opción para jugar fuera de casa. Por si acaso vives debajo de una piedra, te interesará saber que Game Center es una suerte de Xbox Live para dispositivos de Apple, que nos permitirá comenzar a jugar con nuestros amigos en Internet, obtener logros (con su correspondiente variante del «gamertag»), participar en las tablas de clasificación mundiales, y en definitiva, hacer todo lo que Nintendo no considera digno de consideración para sus videojuegos.

Game Center funciona, queridos míos. Salió el ocho de septiembre y ya hay más de cincuenta juegos que se están aprovechando de sus ventajas. Lo cual, teniendo en cuenta que estamos hablando de aplicaciones de la Appstore, que pueden llegar a actualizarse al ritmo de dos parches por semana, supone sólo la punta de un iceberg que en un mes puede ser colosal. No porque de repente vayan a salir más y mejores juegos (algo que por suerte sucede constantemente en el maravilloso mundo de Apple), obviamente; sino por el mismo motivo que Xbox Live mejora sustancialmente la experiencia online: porque medirse la polla con amigos mola. Molaba con trece años, y sigue molando ahora. Por eso, si tienes un iPod Touch o un iPhone y has jugado aunque sea una vez en tu vida con él, te animo a que me agregues «andresito_epi@hotmail.com» para que podamos sacar el metro… y quién sabe si echar unas partidas online a algo.

Como sé que más de uno todavía estará escandalizado por la frase del primer párrafo en la que básicamente digo que las portátiles de Apple le mean en la cara tanto a Nintendo DS como a PSP, me voy a explicar. En algo más de tres años, un servidor sólo sacó de casa su Nintendo DS una vez, y fue para jugar con Kirkis a Mario Kart durante un largo proceso de grabación en la facultad. ¿Por qué? Porque es un tocho inmenso que no se puede llevar en el bolsillo (por lo menos no en mis bolsillos de dandi). Siguiendo la misma tónica, en tres meses que tuve prestada la PSP de un buen amigo, no la saqué de casa ni una vez. El motivo no es que me diese miedo perderla ni mucho menos, sino que para metérmela en el bolsillo tenía que salir yo del pantalón. Lo cual es una puta pena, porque para emular juegos de PSX en casa ya tengo mi ordenador, que lo hace bastante mejor. ¿Veis por dónde van los tiros?

En definitiva (que me tengo que ir a jugar a Civilization), Game Center ha convertido ya a iPhone en una plataforma de videojuegos. Un par de meses más de lustre y unos cuantos añadidos imprescindibles al catálogo, y podremos empezar a hablar de iPod Touch como un jodido consolón portátil. Y portátil de verdad, que ya era hora.

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