Cómo montarse una Steam Box For Dummies

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Me hago pis sobre los tópicos del medio, la PC-fobia por miedo a los sobrecostes inherentes a esta exigente plataforma y el elitismo pro-antialiasing al 16x. En estos días inciertos en los que la autosuficiencia tecnológica es un arte extinto y las máquinas de vapor de Gabe Newell parecen ser la única salvación del verdadero creyente, sale rentable aplicar una filosofía de renovación de hardware que, bien planificada y basándose en el sentido común, permite tener esa máquina cipotera capaz de renderizarle dignamente el vello púbico a Geralt...

THERE IS NO GAME

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Creo que uno de los signos de madurez de un medio comienza cuando se empieza a juguetear con lo metalingüistico. La mayoría de las artes terminan por hacerlo y los videojuegos no son un caso aparte. Desde hace tiempo el videojuego tiene conciencia de sí mismo. Se ha mirado al espejo y se ha reconocido. Autorreferencias, parodias de situaciones que hemos vivido en otros videojuegos e incluso videojuegos sobre crear videojuegos. Quizás la obra más recordada en estas cuestiones sea The Stanley Parable ya sea por su...

La noche me crowdfunding #12

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Hace una semana os comentamos en las Raciones de Epildoritas que publicaríamos esa sección cada dos domingos puesto que irían intercaladas con otra. Sí, ya es un poco estúpido deciros con cuál. Retomamos nuestra sección sobre crowdfunding ya que creo que es importante señalar proyectos interesantes y tampoco queremos publicar en nuestra web noticias excesivas sobre el tema. Por eso condensarlas aquí creo que es la mejor opción. Si queréis compartir algún proyecto de micromecenazgo que merezca la pena o estáis haciendo vosotros uno, ahí tenéis nuestro...

Retro Amor: Dragon Ball Z: The Legend

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Tras tener una Master System 2 y una Mega Drive el salto evolutivo era claro: Sega Saturn. Recuerdo que la conseguí porque un primo mío quería vender la suya para comprarse la PlayStation. Menudo traidor. 20.000 pesetas fue el precio a pagar por mi santo progenitor e incluía un plataformas colorido, Bug!, y Tomb Raider. A mi me parecía una gran compra. Además, era de Sega. ¿Qué más se podía pedir?

Lo más ilustre de junio (2015)

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Sé que a veces entramos en época de sequía donde apenas escribimos mientras que otras veces parece darnos un apretón y nos liamos a redactar artículos por doquier. La pena es que si seguimos un ritmo elevado muchos de nuestros textos pueden pasar desapercibidos para aquellos que no nos siguen a través del feed o para los que entran por aquí esporádicamente. Es por ello que hemos decidido crear la enésima sección de la web que contiene la palabra "ilustre" donde recopilaremos lo mejor del mes para que...

Her Story

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Estamos acostumbrados a que los videojuegos nos hagan creer que somos los protagonistas indiscutibles de la película, los 'elegidos' por decreto. Da igual tener en la pantalla a un señor dando tiros con un fusil de la Segunda Guerra Mundial, que a un pirata soltando cuchilladas a diestro y siniestro, el protagonista siempre eres tú. Tú, videojugador, capaz de usar el mismo mando para salvar la galaxia y ganar la Champions League, eres el objetivo de todos los focos. Y eso está muy bien. Pero también está muy...

One Finger Death Punch

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No siempre más es mejor, y de ello se encargan de demostrarlo la ingente cantidad de títulos que pululan en Google Play o la Apple Store que pueden ser manejados con un par de comandos. One Finger Feath Punch es un titulito de hostias que, traicionando a su propio nombre por ser controlado con dos dedos, juega la baza de la simplicidad mezclada con puñetazos bien llevados a cabo para enganchar cosa mala.

Siete años y quince días de ilustrismo

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Según se dice, la vida humana tiene una evolución interna que va variando cada siete años. Hay progreso. También está escrito que ese sentimiento conocido como el amor solo dura siete años de media. Ya sea en una relación de amistad o de pareja. Cuando cumplí siete años me regalaron una Master System 2. Ahí se podría decir que empezó lo mío con los videojuegos. Hace siete años y quince días Andrés y yo pensamos que ya era el momento. Y pulsamos el botón de "crear blog" de...