Solo hace un día que empezó todo pero supongo que la mayoría ya conoce la historia. Tim Schafer, fundador de Double Fine y responsable de títulos menores como Grim Fandango o Psychonauts, decidió hace algo menos de treinta horas comenzar una campaña de Kickstarter con el fin de recaudar fondos para hacer una aventura gráfica tradicional. El objetivo era recaudar 400.000 dólares en 34 días, que no está nada mal; pero es que los muy hijos de perra han superado la barrera del millón de dólares en menos de 24 horas. Con ese dinero extra que están recibiendo, lejos de fabricarse una piscina de oro macizo, han prometido traducir el juego a un buen puñado de idiomas, hacer un documental muy molón que narre esta aventura y «portar» el juego a todas las plataformas que puedan. Lo importante de la noticia, no obstante, no es que para finales de año vayamos a tener una aventura gráfica financiada por todos a la que, por supuesto, le vamos a exigir una barbaridad; sino el mensaje de que esto funciona. Y con «esto» me refiero a preguntar al jugador qué es lo que quiere y hacerle partícipe desde el principio. Quién sabe, quizás solo jugamos a Call of Duty porque nos lo ponen por delante y nos obligan a comérnoslo, como las lentejas. O no. O yo qué sé. Lo importante es que os paséis por el enlace de arriba y le deis todo vuestro dinero a este señor.