Proximamente en sus pantallas...

La gran mentira del trailer

Escrito por en Artículos - 7 marzo, 2014

¡Enhorabuena gamer! Acaba de confirmarse que esa esperadísima secuela o ese juego del que solo había vagos rumores ya es una realidad y va a ser publicado en breve. Y para celebrarlo, aquí tienes este espectacular trailer que te dará una vaga idea de lo que puedes encontrar, solo que más bonito, más currado y con poco que ver con lo que encontrarás en el juego final. Las redes sociales gritan con entusiasmo “¡GOTY! ¡GOTY!”… Y uno piensa si va a ser verdad que nos hemos vuelto gilipollas…

Watch Dogs

Siempre he entendido un trailer como un adelanto de lo que vamos a ver, como estamos habituados con las películas. Una pequeña muestra de las escenas que disfrutaremos a lo largo del metraje, mejor o peor escogidas, más o menos reveladoras, pero una muestra al fin y al cabo. Por eso, lo que está pasando desde hace un tiempo con los trailers y anuncios de los videojuegos se escapa un poco a mi comprensión, porque en demasiadas ocasiones, todo parecido con lo que veremos en el juego es mera coincidencia.

Podría llegar a entender que se enseñaran las introducciones y cinemáticas del juego, que normalmente suelen estar un poco más curradas que las escenas realizadas con el propio motor del juego, pero ya últimamente ni se molestan en disimular. “Espectacular” “Épico” “Magnífico”… Nos cansamos de leer estos epítetos cada vez que se da a conocer un trailer de este tipo. Y no niego que en ciertas ocasiones no lo sean, solo que me pregunto si no sería mejor invertir el dinero que cuesta hacer esos anuncios en el propio juego y no en escenas creadas únicamente con fines publicitarios.

Quizás el caso de Dead Island es el que os viene a la mente ahora mismo. En el caso de Dead Island, el trailer fue un arma de doble filo. Por una parte colocó al juego en la primera fila de expectación, pero por otra dejó el listón muy alto y mucha gente quedó decepcionada al encontrarse un título decente pero no a la altura de la calidad que se intuía en el celebérrimo video promocional. En este caso, la única reminiscencia del trailer sobre el juego fue una especie de huevo de pascua, en el que el jugador observador podía reconocer el escenario y los protagonistas de los sucesos que emocionaron a tantos. Sin lugar a dudas, algo muy por debajo de las expectativas de la mayoría.

Nos toman el pelo. Hoy mismo internet ruge de furia por un gameplay de Watch Dogs cuya calidad dista mucho de la gran experiencia Next Gen que nos enseñó Übisoft el pasado E3. La maquinaria funciona a pleno rendimiento para seducirnos y hacer la pre-reserva del juego, con DLC exclusivo de la muerte, pero cuando hemos pasado por caja, que nos den.

watch_dogs_e3_2012_vs_march_2014_by_endless_1-d795oxr

Watch Dogs-E3 2013 VS. Marzo 2014. Sobran las palabras

Dentro de poco, en los trailers, además de la calificación PEGI de turno, debería ser obligatoria una indicación en plan “Sugerencia de presentación” como llevan la mayoría de paquetes de comida congelada. La comparación es muchas veces lamentablemente similar y pasar de una apetitosa lasaña a una bandeja de aluminio llena de comida de perro tiene su equivalente en el mundo de los videojuegos.

burguer

Al final, pillarse un juego por el trailer o el anuncio de televisión no se aleja demasiado de aquellos tiempos en los que el criterio principal para elegir un juego era el dibujo de la portada (a los pobres poseedores de la Sega Master System se lo ponían muy difícil), un sistema con el que los chascos están al orden del día. Afortunadamente, hoy disponemos de mucha más información para elegir mejor como gastarnos el dinero. Sin embargo, no puedo evitar sentirme un poco engañado cada vez que veo un trailer en el que las imágenes del juego brillan por su ausencia, por muy elaborado que esté. Será que me estoy volviendo viejo…

Momentos Ilustres: The Secret of Monkey Island

Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty