Análisis: Dishonored

Escrito por en Análisis - 23 octubre, 2012


Dishonored, tercer título desarrollado por Arkane Studios, es el tipo de lanzamiento que la industria del videojuego necesita recibir de vez en cuando para poder tomar aire. A todos nos gustan más o menos (aunque muchos lo nieguen) los Call of Duty, Assassin’s Creed, FIFA, Need for Speed y compañía. De la misma forma que todos disfrutamos muchísimo (aunque otros tantos lo exageren) las obras independientes de Terry Cavanagh, Team Meat, Notch y demás desarrolladores entrañables. Por eso títulos como Dishonored son tan necesarios, porque demuestran que hay vida más allá de esos dos extremos, que todavía hay margen para la sorpresa y la innovación. Prueban, en definitiva, que en esta discoteca llena de «bacalas» y «hipsters» que es el panorama actual de los videojuegos, todavía quedan personas normales. Ahora claro, solo queda tirarles la caña.

Dicen que a buen entendedor pocas palabras bastan, y como quiero pensar que todos los que leéis El Pixel Ilustre lo sois, y el análisis escrito al uso ya lo hice en otro medio, voy a tirar del «una imagen vale más que mil palabras» para este breve, pero espero que revelador análisis.

Coge Thief: Deadly Shadows

… añádele una dosis de la mecánica de Dark Messiah

… otra dosis de la mecánica de Deus Ex: Human Revolution

… y un último toque de Hitman.

Para terminar introduce un poco de Bioshock

nota dishonored

Knights of the Pen and Paper, rol de mesa en tu móvil

Momentos Ilustres: Resident Evil