El diario veraniego de Andresito

Escrito por en Artículos - 17 agosto, 2010

El verano y las vacaciones están sobrevalorados. Miradme a mi, yendo a trabajar en pleno mes de Agosto a las ocho y media de la mañana con una caló de cojones, y tan contento. Claro que cuando tu ciudad está invadida por miles de personas sedientas de alcohol, playas, culos, y música de mierda, abstraerse de todo ello es más sencillo. Por suerte un servidor, que tiene un poco alma de hormiga (ya sabéis, la cigarra y la hormiga), se ha dedicado a almacenar juegos durante el invierno para tener algo que llevarse a la boca en el periodo estival. Y vaya manjares que estoy degustando últimamente. ¡Vaya manjares dignos de la realeza, HOYGA!

Antes de que os lo sigáis preguntando, sí, el de la foto soy yo hace un par de veranos. ¿Guapo, eh? Pues mi señora dice que estoy mejor con el pelo corto, así que ahora os podéis quedar locas. Volviendo al tema que nos ocupa, este verano lo estoy aprovechando para empezar a pulir un poco esa biblioteca de Steam con 111 juegos que tengo. Y bueno, no lo estoy consiguiendo ni de coña porque sólo juego a lo último que me compro, pero qué bien que me lo estoy pasando.

Por un lado estoy en mi segundo recorrido de Borderlands con un soldado. Y aunque a mi los juegos de «loot» y subir niveles a cascoporro de forma completamente descerebrada (véanse todos los clones de Diablo desde el propio Diablo) me suelen tocar bastante las pelotas, he de admitir que la estética y sistema de juego de Borderlands me han capturado. Eso de ir del punto X al punto Y sin preocuparme de nada más que reventar cabezas y recoger algún arma nueva es una maldita delicia. Además, Borderlands y su «ayuda de apuntado» me han descubierto por qué muchos jugadores de consola se han acostumbrado a utilizar un mando. ¡Por que os apunta sólo so perracos! ¡No se os va a dar bien así! Mención especial merece el cooperativo para cuatro jugadores, que si bien todavía no nos ha salido muy bien por la diferencia de niveles, promete unas cuantas horas de pegar tiro espalda con espalda (por la cuenta que nos trae, porque yo quiero esos logros).

Aunque para espalda con espalda la que me estoy marcando en juegos como Alien Swarm o el recientemente ofertado Nation Red, al que analicé en una versión muy primigenia hará cosa de un año (ha cambiado mucho y a mejor). En estos dos juegos estoy disfrutando de lo que es no poder pegar un sorbo de café o agarrar el teléfono por miedo a que tus compañeros la palmen, algo que no experimentaba desde el primer Left 4 Dead. Con la diferencia, claro está, de que si bien el juego de zombis de Valve era como una droga dura de la que me costó salir varios meses, estos dos pequeños títulos en tercera persona no son más que cigarrillos de la risa la mar de simpáticos.

Por desgracia la droga dura que no estoy consumiendo vía Alien Swarm o Nation Red, me la estoy metiendo toda de golpe con el Puzzle Quest 2. Sí, ya lo sé, soy casualón de cojones y juego a lo mismo que vuestras madres y abuelas, pero me encanta. Y debo decir, antes de que empecéis a tirarme piedras, que esta segunda entrega es muchísimo mejor que el primero (y por supuesto que Galactrix). De momento es sustancialmente menos coñazo en el desplazamiento por el mapa, que era mi principal queja con respecto al Puzzle Quest original. Pero es que además, las habilidades están hechas de tal forma que puedes hacer jodidos combos. De hecho, si quieres tener alguna posibilidad con un enemigo decente, ¡debes hacer combos! Y eso me encanta…

Por último, por si acaso alguno sentía el impulso de llamarme «casual» y decirme que vaya a jugar a «Imagina ser heterosexual», les informo que estoy dándole una caña brutal a The Quest en mi querido iPhone. ¿Y qué es The Quest, os preguntaréis todos menos John Carca? The Quest es un RPG en primera persona con estética y jugabilidad de los años noventa capaz de destruir toda vuestra hombría en poco más de media hora. A vosotros claro. A mi, que soy un mago rojo de Zhay de nivel 15, estas cosas me resultan hasta normales. Ahora en serio, si tenéis un terminal portátil de Apple (iPhone / iPad / iPod Touch) y os gustan los RPGs rollo Might & Magic (que no Heroes of Might & Magic) dadle una oportunidad a la demo, porque es un pelotazo de cojones.

Y bueno, por supuesto entre juego y juego me dedico a escribir entradas como esta, llevar el twitter en la medida de lo posible, liarla parda con la PR de Ubisoft (seguro que también lee esto), responder amenazas, y leerme todas vuestras entradas para el concurso ilustre. Ahí es nada, bastardos.

King of Carca 2010 (Crónica)

Sony se hunde a niveles épicos con PSPgo